miércoles, 27 de febrero de 2013
¿HASTA CUÁNDO VOY A AGUANTAR?
Me gustaría saber cuánto puede
soportar una persona que sólo recibe desaires de su familia por el simple
motivo de estar saliendo con un vecino que no les cae bien.
Ese es mi caso, conocí a Nacho
casi sin querer una noche que me ayudó a entrar en casa porque un plasta me
estaba siguiendo y no me dejaba en paz, eso fue hace ya por lo menos seis años.
No lo tuve en cuenta porque iba con su mujer y yo iba muy nerviosa y deseando
llegar a casa.
Al cabo de los años
coincidimos en un bar varias veces hasta
que un día el dueño del bar nos dijo que éramos vecinos. Nos quedamos
extrañados, vivíamos uno al lado del otro en la misma comunidad. A partir de
ahí hablábamos más cada vez que coincidíamos en el bar, pero iba siempre
acompañado por una chica. Un día me enteré que ya no estaban juntos y decidí
tirar la caña. Surtió efecto, una noche nos invitó a mi hermana y a mí a tomar
la última cerveza en su casa y accedimos, mi hermana se fue y nos quedamos
solos. Antes de irme para mi casa me pidió el número de teléfono y le dije que
no se lo daba que yo ya tenía el suyo y con eso era suficiente. No pensaba llamarle pero se me
perdió en su casa un pendiente y le envié un sms al día siguiente, fue mi
perdición. Sabía a qué hora salía del trabajo y la hora a la que llegaba a la
calle, me llamaba y me decía que me estaba guardando un sitio en nuestra calle.
Así todas las noches durante varias semanas. Hasta que una noche accedí a ir a
su casa a tomar una cerveza. Ya la relación fue imparable, me llamaba para
invitarme a tomar café después de comer, por las tardes para ir a tomar algo,
por las noches para salir juntos…
Todo era maravilloso hasta que yo me fui
desestabilizándome, poniéndome más nerviosa, enfadándome por nada, poniéndole
pegas a todo, cada vez que quedábamos le echaba una bronca porque llegaba
tarde, era horrible. No sé cómo continuaba conmigo, quizás sería verdad que me
quería y que estaba enamorado de mí. El caso es que tuve un ingreso y mi
familia le culpó a él. A partir de ahí viví en una montaña rusa, cuando no
estaba con él mi familia me trataba bien y me hablaba bien. Cuando volvíamos,
mi familia me despreciaba y me hablaba con el mismo desprecio con el que me
trataba, incluso me insultaban. Yo cada vez tenía más ansiedad, por lo que
volvíamos a terminar. De nuevo todo bien en casa, pero con la ansiedad de que
no estaba con el hombre al que quería. Le veía estar con mujeres y yo que tanto
le quería estaba sola, lo único que tenía era tranquilidad en mi casa. Volvía a llamarle y quedar con él
para hablar, volvíamos a estar juntos, yo encantada, pero en mi casa todo era
miedo y caras largas y desaires.
Después de ocho meses sin
saber nada el uno del otro y casi sin saludarnos cuando nos cruzábamos por la
calle, hemos vuelto. La situación
en casa os la podéis imaginar: insultos delante de mi hijo, malos tratos
psicológicos, gritos… ya no sé cuánto tiempo más voy a aguantar. He intentado
hablar con mi madre y explicarle lo bien que me trata, que nos está llevando un
caso de estafa porque es abogado y nos lo lleva gratis, que nos está ayudando
también con otras cosas legales que tenemos abiertas, pero ella todavía no se
da cuenta de que nos queremos y nos gusta estar juntos. ¿Hasta cuándo voy a
aguantar?
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1 comentario:
"(...)casa os la podéis imaginar: insultos delante de mi hijo, malos tratos psicológicos, gritos… ya no sé cuánto tiempo más voy a aguantar."
No ves lo que tienes a tu lado. Cuando las cosas no son como tu quieres, cargas contra todo. No valoras nada... Se honesta contigo misma.
Pregúntales a las personas que tienes a tu lado, cuánto tiempo van a aguantar ellas.
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