lunes, 17 de noviembre de 2014
CRÍTICA DE CINE. DOS DÍAS, UNA NOCHE
Se trata de una producción de
Bélgica del año 2014, aunque tiene capital sobre todo francés de numerosas
entidades y muchos organismos, así como canales de televisión como Canal Plus,
siempre apoyando al cine.
No se ha hecho ninguna
publicidad de la película y eso se nota en los pocos espectadores que están
yendo a verla. Por ejemplo: el día que yo fui era la Fiesta del cine, cuando la
entrada costaba sólo 2.90 euros, y la sala estaba prácticamente vacía. Es una
pena que buenas películas pasen desapercibidas por invertir poco en publicidad.
La cinta participó en la Sección Oficial del pasado
Festival de Cannes. También abrió la 58 edición de la Semana Internacional
de Cine de Valladolid, más conocida como Seminci, Semana de Cine de Autor, que
tiene un gran prestigio en el mundo del cine independiente.
Son dos los directores:
Jean-Pierre y Luc Dardenne, que son a su vez los guionistas de la cinta. Esto
como ya he comentado alguna vez viene siendo cada vez más habitual para un mayor control de la película.
Los intérpretes principales
son Marion Cotillard en el papel protagonista de Sandra y Fabrizio Rongione en
el papel del marido de Sandra, Manu. Ambos sostienen casi toda la película,
sobre todo Marion Cotillard, una
reconocida actriz francesa que suele intervenir en películas de calidad.
Hay otros intérpretes, entre
los que caben destacar Pili Groyne, Simon Caudry, Batiste Sornin y Olivier
Gourmet. La mayoría de los actores realizan pequeños papeles. Ya digo que casi
toda la película la llena Marion Cotillard.
La trama es minimalista:
Sandra es una trabajadora que tiene un fin de semana para convencer a sus
compañeros de trabajo para que renuncien a la paga extraordinaria con el fin de ella conservar el empleo. Le acompañará
su marido para apoyarla en todo momento.
Con este sencillo argumento
se llena muy bien los 95 minutos que dura la cinta y en ningún momento aburre.
Se convierte la película en un tiempo muy distraído a pesar del dolor que
encierra la cinta por el problema del paro.
Antes de ir Sandra a casa de
sus compañeros de trabajo para suplicarles que renuncien a la paga
extraordinaria se ha celebrado una primera votación en el trabajo que ha
perdido Sandra. La votación ha sido a mano alzada, pero se estima por ello que
se haga una segunda votación secreta para que nadie se sienta coartado por
ninguna causa.
La segunda votación se
celebrará el lunes. Por eso de ahí el título de la película: los dos días y la
noche que tendrá Sandra para convencer a sus compañeros: sábado y domingo más
la noche del sábado. Parece un título de película romántica, pero es una
película estrictamente sobre el mundo del paro.
Para la segunda votación
Sandra hará un auténtico peregrinaje por las casas de sus compañeros de
trabajo. Se irá encontrando con respuestas diversas. Una pareja incluso se
romperá por el problema de la paga extraordinaria porque la mujer quiere
renunciar a ella y su marido no. Sandra lo agradecerá enormemente.
Sandra cuenta en todo momento
con su marido, pero se siente sola. Únicamente quiere estar en la cama y
aprovecha cualquier momento libre en su peregrinaje para meterse en ella.
Llegará incluso a intentar suicidarse en una escena minimalista máxima:
fríamente vaciará una caja de pastillas en una de sus manos y se las irá
tomando poco a poco con agua. Pero la salvará involuntariamente su marido
cuando la llama diciendo que tiene visita, que es una compañera de trabajo para
mostrarle su apoyo. Cuando oye esto dirá lo del intento de suicidio y la
llevarán al hospital donde le harán un lavado de estómago.
Hay minimalismo hasta en la
ropa pues Marion o Sandra llevará todo el fin de semana la misma ropa. Sólo se
cambiará el lunes cuando vaya a celebrar la segunda votación. Ésta dará un
empate a 8. Es decir, que pierde de nuevo la votación. La empresa le hace una
oferta: esperará dos meses a que cumpla uno de los contratos temporales y
despedirán al que lo ocupa y ella podrá seguir en la empresa. Pero Sandra no
aceptará la oferta de la empresa porque no quiere tener trabajo a costa del
trabajo de otro compañero.
Pero Sandra no se viene
abajo. Ya ha pasado la resaca del suicidio. Ha sido sólo una mala experiencia y
ha descubierto un mayor placer por la vida. De hecho cuando sale de la empresa
recibe una llamada y sonríe y dice que buscará un nuevo trabajo.
Hay minimalismo en todo:
escenografía, música, etc. Pero con un poco material se construye una sólida
película que cuenta sinceramente todo lo que supone el problema gravísimo del
paro.
La película no está recomendada
para menores de 12 años. Supongo que básicamente es por la escena de intento de
suicidio de Sandra, que es muy realista.
La película refleja el drama
social del paro. Nos recuerda a muchas de las películas de Ken Loach, como
Lloviendo piedras, también habitualmente
minimalista.
Se puede hacer una
extrapolación del tema del paro y aplicar la cuestión a España porque el paro
es un problema mundial. En nuestro país más de la mitad de los desempleados no
cobrán prestación alguna. El 15% de los trabajadores son pobres. España es el
tercer país rico con más niños pobres. Y finalmente por no alargar más la
cuestión decir que 20 españoles tienen lo mismo que el 30% de los españoles
pobres. Éste es un tema básico del marxismo: el justo reparto de la riqueza, es
decir, lo contrario del capitalismo.
Estamos pues ante una muy
buena película hecha con lo mínimo y que merece las cuatro estrellas. Lástima
una vez más lo de la publicidad. Pero en fin: yo la he visto y la puedo
compartir con los lectores. Id a verla y pasaréis un buen mal rato con el tema
del paro. Un tema que se va extendiendo
cada vez más en los países capitalistas, mucho más cuando las
diferencias entre ricos y pobres aumenta considerablemente cada día y no paran
de aflorar los casos de corrupción, que afectan incluso a la Monarquía. En fin: un tema
delicado tratado muy bien por los dos directores. Salud y suerte.
Calificación:
José Cuadrado Morales
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3 comentarios:
Pepe, el problema del paro me parece uno de los mas importantes a resolver en cualquier país del mundo y especialmente en España donde la tasa es muy alta. Aun recuerdo cuando empece a trabajar y mi espera de cuatro meses ya con casi 28 años para acceder a mi primer puesto de trabajo( había trabajado antes durante casi dos años pero dando clases particulares, lo que ni cotiza ni se puede considerar un trabajo con futuro), que me dio la delegación de educación de Sevilla, era una sustitución por 15 días. Luego llegarían sustituciones por tres y cuatro meses aunque varias al año y finalmente por un año, en que ya se me hizo interino. Pero desde que me presente a las oposiciones hasta que me llamaron lo pasé fatal. Recuerdo pasar mañanas en que mientras veía la televisión matinal sentía, creía, que se me iba a caer literalmente el pelo si no empezaba a trabajar adecuadamente pronto. Es un problema que puede ser grave, como cuentas que refleja la película. Quizás si se empieza a trabajar pronto se adapte uno mejor, aunque
el problema también existe en personas con una edad mas madura. Es un problema extensible a todas las edades creo. Un saludo
Jesús
Gracias por tu extenso comentario a mi crítica y gracias también por contarme con tanto detalle tu situación laboral. Son muchos los momentos de angustia que se viven con el paro y que la cinta Dos días, una noche refleja muy bien. El cine es una fuente de comunicación y conocimiento extraordinaria que nos ayuda a estar más en contacto con la realidad. Un saludo también para ti y mucha suerte. José Cuadrado.
Gracias Pepe por contestarme y gracias por tus artículos sobre cine que nos tienen al día sobre lo último que se expone en las salas y muchos otros detalles de las películas. El cine es de un punto de encuentro y un espacio para la reflexión además de ser un entretenimiento necesario.
Jesús
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