lunes, 4 de abril de 2011
RELATO
MIEDO A DORMIR
Tengo un problema que me da mucha vergüenza hablar de él. Es desvelar un secreto íntimo que pocos conocen de mí y que me atrevo a referirlo en esta columna de opinión y salud por si existe alguien que le suceda lo mismo que me ocurre a mi o por si existe una asociación de afectados por esta enfermedad. Tomo Ocmin, pero no es suficiente, mi urólogo, al que llevo viendo desde hace poco tiempo, por vergüenza, me ha dicho que no tengo que sentirme inferior a nada ni a nadie por tener Enuresis. Por si alguien no sabe lo que es, yo se lo explico en primera persona, como enfermo. Todas las personas necesitamos cumplir con obligaciones fisiológicas necesarias para el buen funcionamiento de nuestro organismo, por ejemplo, debemos de comer, ir al baño, ir a orinar y dormir al menos ocho horas. Esto puede estar plenamente estructurado y se puede conseguir marcarle al cuerpo unas pautas de comportamiento, de manera que dentro de unos límites estas acciones las realicemos dentro de una franja horaria, más o menos calculada. Hay personas que al levantarse por la mañana lo primero que hacen es ir al baño a orinar. Hay otras que después de almorzar van tranquilamente al baño. Otros a una hora determinada les entra un sueño irremediable y se levantan todos los días del año a la misma hora. Digámoslo así, hemos moldeado nuestras funciones vitales. Sin embargo, hay personas que no tienen esa facilidad por varios motivos. Cosa que nos pasa con le Enuresis. Es la incapacidad fisiológica, es decir, de contener el pipi durante las horas de sueño. En mi caso, concretamente se debe a que soy un enfermo mental, no importa de que, ni lo que tomo. Para que mi mente funcione correctamente tengo que tomarme medicamentos que durante el día no me influyen en nada pero cuando llega la hora de la siesta o de la noche, no controlo la capacidad de despertarme para ir a orinar debido al profundo sueño en el que entro. Siento mucha vergüenza. Esto es un efecto secundario de la medicación. Lo principal es mi salud mental pero no quita que me agobie. Es todo un sufrimiento, porque las horas del días las pasas como una persona normal. Si tienes que ir al trabajo vas y rindes como el que más, si tienes que hacer la compra comparas precio y eliges el que más te convenga, si tienes que conducir lo haces con cautela y procurando no tener ningún accidente de tráfico…por el día eres una persona absolutamente normal y nadie puede señalarte como enuresico porque no das ningún síntoma de tu enfermedad. Pero cuando cae la noche te entra pánico.-¿mojare las sabanas esta noche o no? Más de una noche me he visto duchándome a las tres de la mañana. Poniendo una lavadora y volviendo ha hacer mi cama. Procuro no beber mucho líquido a partir de las ocho de la noche. Si tengo mucha sed me bebo medio vaso de agua. Hago pis antes de acostarme, ya casi de forma patológica, aunque no tenga ganas y espero con ilusión que esta noche pueda descansar seco y tranquilo, sabiendo de sobra que eso no ocurrirá. Hay quien usa pañales, yo soy uno de ellos, pero el pipi es tan grande que sobresale el pañal. Es un condena cada noche, nunca me acuesto tranquilo y siempre pienso en lo mismo antes de acostarme”-habrá fiesta esta noche o podré dormir con tranquilidad” Los límites que pone la Enuresis son catastróficos. No puedes dormir fuera de casa, y si lo haces debes de enfrentarte a situaciones algo embarazosas. Recuerdo uno de mis últimos viajes, unos primos míos que ahora viven en las Islas Canarias me invitaron a pasar allí unos días. Yo, por no molestar mucho, les dije que me quedaba en un hotel. Ellos se opusieron desde un principio pero me mantuve firme en mi postura y al final cedieron. El hotel se llamaba Paraíso Canarias, lo embarazoso viene ahora, pedí a la señorita que atendía el mostrador del hotel una habitación individual para una semana, me dio las llaves de la doscientos siete y me registre. Hasta aquí, todo normal, le pedí, por favor, si podía hablar con el señor director, me dijo que esperase un minuto. La espera fue de más de veinte minutos. La misma chica me busco en el hall y me pidió que la acompañase. La seguí por detrás del mostrador pasamos por unos pasillos y abrió una puerta donde se podía leer en letras negras “Dirección”. - Buenos días, dijo un señor bien vestido de unos treinta y ocho años, Buenos días, conteste, Mi nombre es Rafael León y venia a pedirle un pequeño favor mientras me hospede aquí. Me dijo su nombre, señor Sierra, y cual era ese favor para saber si estaba dentro de sus posibilidades ayudarme o por el contrario escapaba a su competencia. Verá tengo Enuresis nocturna, si una especie de sonambulismo, No, no, nada de eso, quizás sea más problemático, hable, hable, le escucho, Bien, la Enuresis es la incapacidad de controlar la orina durante las horas de sueño, yo en mi equipaje traigo pañales pero es insuficiente así que me gustaría pedirle el favor de tener siempre en el cuarto un juego de sábanas limpias y que diariamente me cambiasen las sabanas pues olerán a orín, también bebería de poner en mi habitación que es la doscientos siete una cobertor de colchones impermeable para que el colchón sufra lo menos posible y avisar a las camareras de que muy probablemente encontraran mi cama húmeda todos los días. (Por fin lo solté). Una gota de sudor frió me caía por la sien. Me sentía en un ambiente enrarecido, acaba de contar mi secreto a un desconocido y este podía afectar al funcionamiento diario del hotel. El señor Sierra creo que se quedo algo impresionado con mi franqueza. - De acuerdo, de por hecho todo lo que me ha pedido, y déjeme que le diga una cosa, es usted una persona muy valiente aunque tenga el problema de la Urosis, Enuresis, señor Sierra, Enuresis. ¿Qué habrías hecho tú? ¿Se te habría ocurrido alguna idea mejor que decir la verdad?. De mi enfermedad mental, mi otro caballo de batalla, estoy mucho mejor. Tengo menos delirios y mi psiquiatra me ha visto más recuperado que la última vez. Le conté lo de la Enuresis, y me ha cambiado la medicación, ahora tomo menos por la noche y más durante el día. Esto hace que me encuentre con un poco de apatía pero lo sobrellevo bien. Ahora las micciones nocturnas no son diarias y esto es importante para mí. Una multinacional de la alimentación, que tiene su sede en Aranda del Duero, nos ha invitado, a algunos de la empresa, a pasar un fin de semana en sus instalaciones, con el objetivo de lanzar al mercado una serie de productos nuevos para las personas que no pueden tomar gluten. Quieren hacernos participes de este proyecto y que veamos en primera persona si son adecuados los procedimientos de elaboración. A mi lo primero que se me vino a la cabeza saben ustedes lo que es, ¿no? Todos los delegados lo recibieron de una forma u otra: yo ya tenía planes para ese fin de semana, ¡estupendo! Nunca he estado en Aranda del Duero, etc., etc.; mientras yo pensaba si llevarme los pañales o no. Nunca he tenido pareja formal desde que tengo este problema, antes si, con absoluta normalidad. Pero desde que caí enfermo de los nervios por la separación con mi pareja, la vida me ha cambiado por completo. ¿Cómo le explicas tu a una mujer que teniendo cuarenta y cuatro años puedes hacerte pipi en la cama como si fueras un niño de seis? ¿Cómo explicas tú que tiene que dormir con un pañal? Yo salgo de noche los fines de semana, con los amigos, pero no voy a ligar, no vaya a ser que tenga suerte y tenga que dar explicaciones o quedarme toda la noche en vela. Bueno, He intentado explicar algo sobre la Enuresis, espero que me hayáis comprendido lo difícil que es convivir con esta enfermedad.
LA PLUMA NEGRA
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1 comentario:
El 1% de los adultos tienen enuresis y todas las personas que tomen medicamentos que produzcan enuresis también tendrán enuresis. Realmente es algo que no puedes controlar y no deberías dejar que algo que se escapa de tu alcance te fastidie tanto. Tal y como dijo el de dirección eres muy valiente al contarlo y deberias tener la misma valentía para contarselo a tus amigos o la gente con la que tienes más confianza, te quitarás un peso de encima y verás que realmente no lo ven tan espeluznante. La enuresis es un problema más común de lo que piensas y la mayor parte de la gente la ha tenido alguna vez aunque fuese de pequeños, ¿quién no ha mojado la cama alguna vez?, lo que significa que entenderán lo que se siente y no van a reirse, basta con que les expliques que es por una enfermedad medica. Con respecto a lo de que traspasa el pañal... tal vez deberias cambiar el tipo de pañales, buscar unos más absorventes... y ponerte pantalones para enureticos (son como de plastico, asi no pasa a las sabanas). Además de la funda para el colchon que se pone debajo de las sabanas también hay protectores impermeables que se ponen encima de las sabanas. Entre los pañales, los pantalones de plástico y el protector impermeable de encima de las sabanas es casi imposible mojar las sabanas. Esto significa que puedes contarle a tus amigos que te pasa eso, llevar tu pañal, pantalones de plastico y protector impermeable y no pasa nada. Puedes ir a donde quieras.. no dejes que se convierta en un problema de verdad.. que no te impida dejar de hacer nada. Ánimos --Syris--
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