lunes, 7 de septiembre de 2020

ENTREVISTA A JOSÉ GALÁN. PRECURSOR DEL FLAMENCO INCLUSIVO.

¿Cuando te iniciaste en el noble arte del flamenco cuáles fueron tus primeros pasos?

Pues yo comencé a bailar con unos siete años más o menos pero como cualquier sevillano, cualquier andaluz,  mi madre me apuntó a una academia de baile para aprender sevillanas, rumbas, lo típico, pero no fue ya hasta los 8 o 9, a los 2 años más o menos de estar bailando y presentándome a concursos de sevillanas, cuando uno de los profesores le dijo a mi madre, que ¿por qué no me apuntaba al conservatorio para sacar la titulación de danza oficial ya que tenía habilidades? se me daba bien el flamenco, que no lo tomara solamente como un hobby sino que debía estudiar una carrera porque podía dedicarme a ella.

El flamenco es pasión alegría desgarro ¿Como continuarías y explicarías estas facetas de este arte?

Efectivamente, el flamenco es un vehículo transmisor de las emociones y de los sentimientos, es una manera de canalizarlas, además de expresión es comunicación no verbal, por qué se hace con el cuerpo y lo que yo no sea capaz de comunicar con las palabras, puedo hacerlo con el baile. Personalmente, cada vez que ensayo, doy una clase o bailo en el escenario me siento bien, y una vez que la he terminado ya sea si me pasa algo bueno o algo malo, lo puedo desahogar a través del baile, entonces es un generador de alegría también.

Como lo estas contando ¿puede ser tu propia medicina no?

Exactamente el antídoto ante la depresión y ante los problemas, ya te digo, da la casualidad que comencé a bailar con 7 años, somos cuatro hermanos y yo soy el más pequeño. Cuando yo tenia unos 5 o 6 años mi hermano, que iba por encima mía, falleció con unos 10 años de un cáncer. En esa época teníamos en casa un negocio familiar, un kiosco, mi madre lo cerró y se dedicó precisamente a llevarme a Sevilla, pues yo soy del pueblo de Camas, a estudiar danza en el conservatorio. Esto le sirvió también a mi madre incluso a mí, el arte flamenco como un refugio ante algo tan triste como la perdida de mi hermano, del hijo de mi madre. Dedicarme al mundo de la danza y estar entretenido nos sirvió como una vía de escape.

¿Quiénes son o han sido en el cante y el baile tu preferidos? ¿Qué matices descubres en ellos?

Es verdad que yo he consumido flamenco, como cualquiera de nosotros, desde siempre, ya sea de Camarón, La Niña Pastori o todo el flamenco comercial, pero no es hasta mucho más tarde cuando ya me dedico al flamenco de forma profesional cuando empiezo a interesarme por cantaor@s y bailaor@s, incluso ya muertos de la historia del flamenco. Necesitaba aprender la parte teórica, saber de dónde vienen las raíces de su flamenco, no solo para aplicarlo a la práctica sino para conocer la riqueza cultural tan importante que tiene este arte, sus letras, sus estilos, no solamente lo que se canta sino también como se cuenta. Un fandango por ejemplo, en tres o cuatro frases te está contando una historia, muy condensada pero con una moraleja y muy bonita, esto es impresionante y acaba enganchando.
El flamenco es un sentimiento y una forma de vivir, aparte por ser andaluz yo creo que también tengo la suerte de tenerlo más cerca, mas a mano porque si resulta que soy japonés lo tengo más complicado, pero para que veas que incluso allí les encanta, pues además desde el 2010 es patrimonio inmaterial de la humanidad.

¿José dónde has realizado tu carrera artística entendiéndose que el flamenco no tiene fronteras? Resúmenos un poco tu recorrido.

Pues mi carrera artística o sea ya como profesional comenzó con 17 o 18 años, empecé a bailar en un tablado de Sevilla y después en compañías de teatro y danza, uno de mis trabajos más importante fue con Salvador Tavora, que falleció hace poco, con la compañía de teatro LA CUADRA de Sevilla. Gracias a los inicios con él en el 1999, tenía yo apenas 18 años, viajé por todo el mundo. Gracias a mi trabajo he viajado a la otra punta del mundo, Australia, Nueva York ... viajando se aprende mucho de otras culturas, de otras formas de entender el mundo. Y vives muchísimas anécdotas, la primera vez que fui a Nueva York, en el 2001, fue cuando ocurrió lo de las Torres Gemelas, muchos de mis compañeros fueron a visitarlas por ocio y un poco más y les cae la torre encima, vamos que también se pasa miedo.
También se aprende mucho de la alimentación de otros lugares, hoy en día yo como de todo, pero cuando era más joven e iba a China y muchas de las comidas de allí me daban asco.
Estas cosas te hacen madurar mucho y ser consciente de la gran diversidad cultural y humana que hay mas allá de nuestro lugar de origen. También de la importancia de llevar la disciplina que requiere el baile porque es algo que tienes que estar practicando todos los días.
Al mismo tiempo he estado compaginando el flamenco con los estudios porque me quería formar también de forma académica, no solamente decir yo soy artista y me dedico al baile, yo quise estudiar y por eso me quedé en Sevilla, no me fui a Madrid, quería tener una carrera universitaria, estudié pedagogía, un máster de educación social y precisamente por eso me dedico al mundo del flamenco pero también con un compromiso social muy fuerte.

¿Qué nos aporta el flamenco a las personas que padecemos una enfermedad mental?
 Como bien he dicho antes al igual que el flamenco para mí fue una especie de terapia puede serlo para todo el mundo, no solamente para las personas que tengan algún tipo de enfermedad o de diversidad funcional o de discapacidad sino que para todo el mundo. La música y el arte en general nos sirven para transformarnos, para mejorar para dejar ahí nuestras alegrías, nuestras frustraciones. No es solamente el baile sino el hecho por ejemplo de escribir, la poesía, el hecho de pintar, estas actividades te relajan, te llevan a otro plano. Hay cosas que no somos capaces de expresar con palabras, pero a través de un dibujo o a través de un movimiento somos capaces de hacerlo. Expresarnos libremente le sirve a cualquier persona,independientemente de que tenga o no una discapacidad, una de vía de escape para canalizar sus emociones encontrarse y conocerse a uno mismo.
Yo creo que las personas con enfermedad mental lo que tienen también es mucha sensibilidad, creo que nadie nos prepara en la vida para vivir o gestionar nuestras emociones. El arte es una herramienta genial para utilizarla como medio para la transformación personal y la transformación incluso de la sociedad. sobre todo teniendo en cuenta que cada vez vivimos en sociedades mas egoístas e individualistas.

¿Con que grupos has participado de manera inclusiva?

Yo empecé el tema de la inclusión con chicos con síndrome de Down, con personas con discapacidad intelectual, sensorial, con personas ciegas y personas sordas, después con personas con discapacidad física y por último con personas con enfermedad mental. También con chicos en riesgo de exclusión social o mujeres con cáncer de mama. Cuando yo hablo de inclusión o de diversidad la gente se cree que yo me dedico solamente a personas con discapacidad y no, es inclusión general, le puedo dar clases lo mismo a un niño pequeño que una persona anciana porque hoy en día hay muchos grupos desfavorecidos. Un grupo desfavorecido es por ejemplo el de las mujeres el propio género hombre - mujer una mujer puede estar discriminada en su trabajo por el simple hecho de ser mujer, ella puede cobrar un dinero por hacer un trabajo y su compañero cobrar más dinero por hacer lo mismo. La verdad que he trabajado con casi todos los grupos de personas y todo todos me gustan.

¿Qué palo del flamenco crees que es el más conveniente para iniciarse y cuál es el que mejor se te da?

Hay tantos palos del flamenco y son tan bonitos que es difícil decidirse, si queremos bailar las emociones a través de flamenco podemos trabajarlas todas ya que da la casualidad que en el flamenco encontramos todas las emociones.
Hay gente que dice que el flamenco es muy triste, no, el flamenco tiene de todo tristeza, alegría, melancolía, amor, desamor, trata todos los sentimientos universales, gracias a que hay muchos palos, dependiendo del palo de flamenco que tú elijas se puede transmitir una emoción u otra incluso hay algunos palo del flamenco que se llaman como esas emociones por ejemplo la alegría o la soledad que no es triste es más bien intimista.
Desde mi punto de vista los bailes mas básicos, con los que debería empezar un principiante son los que tienen un ritmo más sencillo como los tangos, yo pondría también los fandangos y la alegrías, podría decir que eso que son los más sencillos.
Estos son los que mejor se me dan por su sencillez, pero hay otros bailes que también creo los hago bien porque se me representa y me siento identificado con ellos, son por ejemplo la solea y la seguidilla.

¿Por qué iniciar el flamenco inclusivo?
En el año 2004 me apunté a un curso que se llamaba “lo educativo de la danza”, me pareció muy interesante por que unificaba las dos disciplinas, la educación y la danza. El último día del curso invitaron a unos chicos con discapacidad intelectual y nos invitaron a bailar con ellos, quién quisiera de forma voluntaria, me puse a bailar con ellos, no los conocía de nada ni al chico ni a la chica y lo que sentí fue tan especial, chica, me gustó tanto, que me llegó. Creo que el flamenco trata no solo de perfección sino también de la autenticidad de bailar con el corazón, con la verdad, sin tabús. Eso es lo que tienen ellos precisamente, que no tienen tantos prejuicios como nosotros, no estamos bailando estamos pensando y lo haré bien lo haré mal, mira que me está mirando y qué vergüenza, ellos lo hacen de forma espontánea.
Pero no empecé con el flamenco inclusivo de manera inmediata, primero di clases de danza contemoporanea, continué buscándome un hueco en las grandes compañías, incluso estuve en Madrid trabajando con Sara Varas.
En 2010 creo mi propia compañía, en esa época no no había ninguna compañía de flamenco inclusivo. Creamos un espectáculo en cuyo elenco de artistas había algunas personas con discapacidad, en el primer espectáculo eramos siete y cuatro eran personas con discapacidad. Fue un trabajo empático donde nadie era mejor que nadie, nadie integra a nadie. Las personas con discapacidad no necesitan que las integren, la discapacidad no está en la persona, esta  en el entorno, y es este el que tiene que facilitar que todos tengamos la misma igualdad de oportunidades.

¿Como pensaste incluir la salud mental en el flamenco inclusivo?
Recuerdo la primera vez que me topé con la salud mental  fue realizando una visita al psiquiátrico penitenciario, fui con Esmeralda Valderrama,   la directora del Centro de Danza Móvile, que trabaja con chicos con discapacidad intelectual, allí conocí al psicólogo que llevaba el proyecto “onda cerebral”,  era una emisora de radio interna de la cárcel y  me encantó conocer a las personas de allí. Hombre, son personas que están allí porque han cometido un delito, aunque  estén cumpliendo una condena todo el mundo tiene derecho a una segunda oportunidad y sobre todo porque, ¿cómo se dice?...  que tire la primera piedra el que esté libre de pecado.
Hace ya casi 20 años mi padre se puso enfermo, después de un ictus,  incluso antes de esto él ya  lo estaba cuando yo era pequeño, siempre ha tenido algo, lo que pasa es que muchas veces no se diagnóstica porque la persona no va al médico o no se quiere tratar. 
Realmente yo creo que mi padre si tenía algún problema que no gestionaba bien. Lo malo es que se unan los problemas de conducta con algunos hábitos poco saludables, mi padre bebía y entonces se llevaba dos o tres días rarísimo, en casa, sin querer salir. Algunas veces, con nosotros no, pero si lo pagaba con mi madre,  es la primera vez que lo estoy contando y lo hago público. Hablar de todo esto cuesta mucho y está muy relacionado con el estigma que rodea a la enfermedad mental.
Igual que debemos  ir al dentista porque se nos pica una muela, nos duele la rodilla o cualquier cosa de salud física es muy importante ir a un especialista para los problemas mentales y  hablar con la misma naturalidad que si lo hiciéramos para un problema físico. 
Estoy muy contento de poder trabajar también con usuarios de salud mental, llevo menos tiempo con personas con este tipo de trastorno, unos tres años mas o menos.


¿Qué puede aportar al flamenco el mundo de la discapacidad y que te ha aportado a ti como persona?

 Trabajar y tratar de cerca con personas con discapacidad funcional me ha hecho crecer mucho tanto  pero hasta ahora me aportado mucho, y me han hecho crecer mucho a nivel personal y a nivel profesional. A nivel personal precisamente por  ponerme en el lugar de la otra persona. Recuerdo un día que viajé con mis padres a Madrid,  recuerdo que mi madre  se quejaba de que la gente iba con prisa a todos sitios dando empujones.  Me hacía mucha gracia mi madre porque le decía a la gente -" Ay cuidado que mi marido no está bien, que mi marido está malo".
Es una pena que un familiar tenga que ir diciendo por ahí que su hijo tiene autismo o que su marido tiene amnesia o que tiene problemas mentales, creo que la culpa es de la sociedad que no está concienciada, se han perdido muchos valores y ahora lo que predomina es la ley del mas fuerte, estamos en un mundo demasiado competitivo. Lo que está mal es la sociedad no las personas, cada persona es distinta y como tal tiene muchos problemas y defectos, pero también tiene sus cosas buenas, eso es lo importante, lo positivo.
El mundo de la discapacidad me ha aportado muchísimo, me ha ayudado a  ponerme en el lugar de la otra persona, para poder ayudarle. Yo personalmente antes de enseñar a una persona ciega, por ejemplo, me tengo que poner una venda en los ojos e intentar conocer lo que siente , igualmente para enseñar a bailar a una persona en silla de ruedas yo me tengo que sentar en la silla de ruedas para ver como se puede bailar. Es fundamental darte cuenta de las barreras con las que esas personas se encuentra en su día a día, pero no solo físicas sino sociales, como la gente las trata o el concepto que tiene de ellos.
Para mí esto es un aprendizaje continuo y las mejores herramientas con las que contamos son el amor por lo que se hace y el sentido del humor al hacerlo.

¿Qué es lo que la discapacidad puede aportar al flamenco?

Lo que la discapacidad aporta al flamenco es algo muy interesante ya que se establece una relación bidireccional en cuyo eje central encontramos la diversidad y el trabajo en equipo.
Por ejemplo al  zapatear, si una persona no zapatea ¿no se hace flamenco? ¿no puede bailar flamenco? o si yo tengo 80 años y era un pedazo de bailaor pero yo ahora mismo no puedo bailar de lo que me duelen la piernas ¿ya no soy bailaor?. Claro que sí,  se puede bailar de cintura para arriba o sin zapatear, es muy interesante eso, que una persona utilice sus capacidades para disfrutar del flamenco, es cuestión de adaptarse a la realidad de cada persona independientemente del tipo de discapacidad que tenga.
Cuando se trata de discapacidad se produce un fenómeno muy interesante ya que a diferencia de en otro tipo de elencos donde cada artista va un poco a lo suyo, aquí es fundamental el trabajo en equipo y la unión de unos artistas con otros, quizás el resultado no es tan perfecto, pero si muy bonito, porque se  ha hecho en armonía y gracias al trabajo en equipo.
Ahora con  la pandemia nos damos cuenta que todos dependemos unos de otros, en realidad todo el mundo es dependiente de una u otra manera de los demás, debemos ser conscientes de ello . 

¿Has pensado alguna vez en dejar el flamenco?
 Creo que no, es verdad que uno a veces  se desanima, yo llevo muchos años en esto y no siempre han sido las cosas fáciles. Desde el 2010 que cree la compañía y gracias a ella estoy siendo mas conocido, es ahora cuando estoy empezando a recoger las semillas de tantos años de trabajo.
No es fácil, recuerdo cuando estaba estudiando algunos profesores o profesoras eran antipedagógicos, te quitaban las ganas de seguir bailando, yo recuerdo hartarme de llorar y en más de una ocasión plantearme tirar la toalla.
No es un camino  fácil, incluso en el mundo de la discapacidad, yo  pensaba que aquí habría menos competencia que sería algo mas bonito, mas sencillo, pero no ha sido así me he encontrado con muchas críticas poco constructivas, incluso dentro del mismo mundo de la discapacidad. Eso te duele, que un vecino te critique, duele pero te da mas o menos igual, pero que lo haga tu hermano te duele más. 

Es cierto que me han entrado ganas alguna vez de desistir, pero no voy a tirar la toalla. Hay una frase muy bonita que además no es mía sino de una chica con discapacidad física,  que se llama Virginia Fernández, esta se desplaza en una silla de ruedas eléctrica y apenas si tiene movilidad que dice que  “el arte es el único amor que no te abandona “¿qué bonito no?
Como  diciendo habrá amigos que dejen de ser tus amigos, incluso puedes perder a un familiar como tus padres porque son más mayores, pero sin embargo el arte la música, la poesía, la pintura, es ese refugio en el que todo el mundo se puede sentir a gusto, libre incluso acompañado.

¿Que aporta a tu vida el flamenco?
A mi muchos problemas, ja ja ja, pero a la misma vez me aporta muchos logros y me aporta mucha felicidad, ya te digo es como mi pañuelo de lágrimas, tanto para lo bueno como para lo malo está ahí.
Es curioso porque mi flamenco no es igual al tuyo o sea cada uno siente el flamenco  de una forma distinta, por ejemplo si aquí se sienta Farruquito o cualquier personaje flamenco gitano dirá  "mi flamenco es el válido", pues pienso que no, que el flamenco es algo universal y asequible a todo el mundo, por ejemplo, imaginaos el flamenco que siente una persona japonesa, aunque cante fatal porque no domina el idioma, pero si ella se emociona, le gusta y lo ama su flamenco es tan válido como el mio.
El flamenco tanto en el cante como en el baile es muy personal, tiene múltiples matices,cada persona tiene una forma particular de sentir y de hacer el flamenco, es algo tan personal, tan mío, que nadie me lo puede robar, es como nuestra voz,  la voz que tiene cada persona es diferente, unos  la tienen más aguda,  otros grave, es algo que nadie te  puede arrebatar, en lo diverso está la riqueza. Vivimos en una sociedad plural, diversa donde cada ser humano es diferente e imperfecto por naturaleza de ahí viene la belleza, lo que pasa que nos venden el ideal de la perfección intelectual de la perfección física que esto no nos lleva a ninguna parte.

¿Tienes alguna anécdota divertida que quieras contar cómo profesor o cómo bailaor?

Verás, hay muchas anécdotas divertidas, yo intento en mis clases utilizar  una terminología inclusiva, por ejemplo me ha ocurrido que con personas en silla de ruedas yo decía que caminamos o damos cuatro pasos para adelante o para atrás, lo que producía risas y protestas en los participantes ¿pero si vamos en silla de ruedas como vamos a dar pasos?.  Me he tenido que adaptar en las clases para hacerlas mas accesibles, por ejemplo, digo rodante a la gente que va en silla de ruedas, intento decir desplazar en vez de caminar, todo se soluciona con ganas y buen humor.
Lo mismo ocurre con las personas ciegas cuando al despedirme, de manera automática, les digo -"Nos vemos mañána", en realidad es cuestión de darnos cuenta si metemos la pata e intentar solucionarlo de la manera mas natural posible, ahora intento decir -"mañana quedamos"
Con respecto a las anécdotas, esta no es de mis clases, pero mas que graciosa me parece superbonita, Recuerdo una en que un medio de comunicación le preguntó a  a un chico con síndrome Down ¿tú qué quieres ser de mayor? Este chico, que era de mi edad, les contestó que el era más bailarín que Down, lo que provocó un incomodo silencio entre quienes hacían la entrevista. Todavía hoy no se sabe como tratar a este tipo de personas, no, no son niños chicos para que los traten como tales.
Continuaron la entrevista haciendole una pregunta a otra la chica con síndrome de Down, Reyes, le dice,  ¿qué es el flamenco para ti? Y responde esta - "el flamenco soy yo".
Los medios de comunicación deben ser sensibles a la gente con distintas capacidades y tratarlos de una manera adecuada sin prejuicios ni estigmas.

A raíz de la pandemia se ha producido situaciones de estrés importantes entre los sanitarios, fuerzas del orden, personal de supermercado, etcétera ¿Sería sugerente iniciarse en un actividad como la tuya para eliminar tensiones?

Pues la verdad que sí, aquí en España no somos conscientes todavía de la importancia de la arte terapia, pro así llamarlo, pero yo tuve la suerte de viajar a Estados Unidos en el 2015 y en los centros sanitarios se contemplaba esta figura. Es algo complementario a los tratamientos farmacológicos y aporta bien estar intelectual, físico y emocional. Muy recomendable, claro que si.

¿Como te ha afectado profesional y económicamente la aparición de la pandemia por COVID-19?  

 Pues la verdad que relativizando y comparando con otros compañeros, no estoy en la peor situación, pero hemos tenido que anular muchas cosas. Me ha dado mucha pena tener que suspender una gira que teníamos durante quince días en Estados Unidos. No iba allí desde el año 2015 y tenía muchas ganas de cruzar el charco. Nos han anulado muchas acciones y proyectos algunos de ellos de cierta importancia,  al no haber un contrato físico te quedas desamparado y sin ayudas, pero bueno lo importante es la salud y que estamos con motivación para cuando esto mejore.
Después del confinamiento he paseado mucho por el rio y he visto a mucha gente haciendo lo mismo, creo que ahora valoramos más las cosas porque hasta que no las pierdes  no las valoras,  Ahora valoramos más el simple hecho de estar aquí juntos tomándonos un café, el pasear, la vida son los pequeños detalles y no los grandes lujos.  Yo creo que debería de servir a la gran mayoría para reflexionar sobre lo que realmente importa, lo que son las pequeñas cosas. Creo que deberíamos tomarnos el confinamiento como una lección de vida, mucha gente ha tenido que dejar las prisas, las ambiciones, el consumo excesivo y se han visto en casa con su familia con sus hijos, ayudándoles con los deberes o haciendo las tareas domésticas. Eso es lo que verdaderamente importa, todos somos iguales, todos dependemos unos de otros y nadie es mas que nadie.

Teniendo en cuenta la situación actual ¿Que nuevos proyectos profesionales tienes en mente?

Todavía no estoy trabajando corporalmente pero si mentalmente, imaginando nuevos proyectos, a lo mejor no para ahora mismo, pero si para más adelante. NO hay que detenerse hay que buscar las cosas, cuento con la ayuda de mi compañera Lola, que ya es socia de la asociación, también  tengo un representante, pero al final para que te vayan bien las cosas tienes que luchar tu mismo. Uno no encuentra trabajo si se queda en casa viéndolas venir, hay que hacer muchas llamadas telefónicas y tocar muchas puertas.
También  he aprovechado estos meses para llamar y contactar con gente que hace mucho que no lo hacía, para conservar la amistad hay que cuidarla y este ha sido un buen momento para hacerlo, lo mismo ocurre con la familia, ellos viven en Arahal, hay que buscar momentos para celebrar más la vida, no solo en las fechas señaladas, cualquier momento es bueno. Estamos aquí para dos días y hay que intentar ser feliz.

¿Cómo ves la situación de tus colegas de profesión en la actualidad?¿Ha surgido algún tipo de actividad flamenca diferente?

La mayoría de mis compañeros han seguido trabajando de forma on line, yo también  he dado clases una vez por semana, porque si realmente estoy cobrando dinero tengo que justificarlo con mi trabajo. Aun así, no me parece el medio mas adecuado es algo frío e incompleto, falta lo mas importante, el contacto, y no me refiero únicamente al contacto físico, de la piel, que con la pandemia lo vamos a tener complicado, pero si al contacto visual, al escucharnos al sentirnos cerca en un mismo espacio.
Lo que si me parece que ha generado esta situación ha sido que parece que la gente se ha unido un poco más, incluso en el flamenco. En nuestra disciplina hay mucho individualismo, hay artistas consagrados como Poveda,  Sara Baras, Antonio Canales que en principio no tienen muchos problemas para trabajar, ¿pero qué pasa con el resto, con la gente que trabajamos en pequeños teatros, en compañías independientes y que no tenemos tantas oportunidades?
Para que funcione la cultura es importante que lo hagan todos, no solamente los artistas consagrados y que estos apoyen al resto de los profesionales.
Ya para cerrar la entrevista me gustaría remarcar que es la sociedad la que tiene que cambiar, luchar contras los estigmas asociados a la discapacidad, estar preparada para ser mas igualitaria, justa y diversa. Las etiquetas solo valen para la ropa, en las personas lo único que hacen es crear problemas. Esperemos que poco a poco se consiga.

Te agradecemos mucho que nos hayas dado esta entrevista y deseamos que te vaya genial en tu bonito camino.



1 comentario:

  1. Un artículo maravilloso. Desde aquí darle las gracias a José Galán y a los entrevistadores. Me ha sido muy util todo lo que se dice en el artículo. Siempre mirando hacua adelante. Hasta luego. Jesús. Aunque publico el comentario con mi correo electrónico no dejeis contestación , solo utilizo movil y al correo no tengo acceso.

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