Hola mi nombre
es José María y os quiero hablar del
significado que tiene para mi, la obra literaria del insigne Miguel
de Cervantes Saavedra ( El Quijote ).
Mis estudios
académicos son básicos, estudie de crio la antigua Educación
General Básica (E.G.B.), obteniendo el titulo
de Graduado Escolar con bajas notas.
Puntualmente en la
asignatura de Lenguaje, obtuve nociones sobre la obra, pero donde mas
aprendí de ella, en aquellos tiempos, fue visionando por televisión
una serie de dibujos animados muy divertidos. Por la vista comenzó
mi cariño, por Don Quijote de la Mancha, por su fiel escudero Sancho
Panza, la amada por el protagonista de la obra, Dulcinea del Toboso y los amigos incondicionales que son el Barbero y el cura.
Don Quijote Hidalgo
e ingenioso en cada capitulo semanal, se enfrentaba con gallardía
como buen caballero andante que era, a todo tino de sucesos y
aventuras, Gigantes que eran Molinos, presos condenados a remar en
Galeras y el caballero de la triste figura, como también era
conocido, nuestro aventurero, libraba a estos de sus cadenas y
gilletes, enfrentándose a los guardias que los trasladaban y
vigilaban.
Las ventas de los
caminos, a los cuales debido a su imaginación alterada, pero real
para él, creía que eran castillos y los venteros Nobles y los odres
de piel, donde guardar el vino malhechores. ¡Qué risas!. Menos mal
que su fiel escudero siempre le decía la verdad, desde el punto de
vista de una persona humilde y bondadosa.
Años después de mi
época colegial, reviví las aventuras del Ingenioso Hidalgo, en
varias películas televisivas. Mi referencia fue la protagonizada por
dos grandes actores, Fernando Rey en el papel de Don Quijote y el
siempre divertido Alfredo Landa haciendo de Sancho Panzas.
El teatro, hace unos
años trajo a Sevilla a mis queridos e inmortales personajes. Don
Quijote y Sancho Panzas vi la obra, en el Lope de Vega de personaje
principal actuó el actor José Sacristán, de larga y dilatada
carrera. El cual como se suele decir por aquí, bordó el personaje
de Quijote; el resto de actores y actrices, desconocidos por mí,
también estuvieron estupendo el lleno en el teatro era absoluto
conseguí al finalizar la obra, fotografiarme con José Sacristán
(Quijote).
Me faltaba lo
primordial, la lectura del libro, lo mandé pedir en una
papelería-librería de mi barrio, a la propietaria le tengo mucho
afecto, me trajo uno, que conmemoraba el cuarto centenario de la
publicación, de “El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha”.
He tenido el libro
guardado como los buenos vinos y ahora poco a poco lo he comenzado a
saborear las expresiones del siglo diecisiete, los grabados que trae
esta edición especial, la textura y el olor del papel, por eso y por
mucho mas se ha convertido esta obra en mi novela principal.