Dicen que la raíz de todo esta en el comienzo, todo proceso
lleva una finalidad, pero lo que importa no es la finalidad si no el sentido
del proceso, disfrutar del camino. Mientras creces es la mayor energía que
puedes sentir y anclarte es morir en el intento, no importa cuantos soles veas,
no importa cuantas lunas duerman lo real, estas vivo y puedes contemplarlas.
He muerto en el camino pero he resucitado, ese es mi destino.
Estoy segura que puedo alcanzarlo, nunca digas “no puedo”, di “lo intentare”,
nunca duermas con los ojos cerrados si no abiertos a los sueños y jamás te
limites porque cualquier cosa constructiva tiene sentido. Si te limitas
empiezas a ver las cosas cansado y revientas de agobio porque no eres positivo.
La mejor medicina que te puedes dar es creerte que eres distinto hasta por fin
conseguirlo, creértelo y el disfraz se convierte en ti, en lugar de un
envoltorio que usas para esconderte, si te enfadas grita contra la pared sin
dañar el alma de nadie y sigue tu camino y cuando rías comparte tu sonrisa pero
sobre todo no te dejes engañar por la falsa felicidad si no por la humilde
destreza de ser feliz. Cuando te compares hazlo desde la raíz desde tus fallos
para no despreciar al otro porque cualquier persona puede sorprenderte, darte un consejo, no llores por desgracias, se
fuerte y arranca la posibilidad.
Ninfa
Bravo. Buen artículo
ResponderEliminary gran mensaje!!
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