Estamos ante una película de
Estados Unidos del año 2015 dirigida por James Vanderbilt y protagonizada entre
otros por Topher Grace, Cate Blanchett (desde que fue oscarizada trabaja mucho
más. No tiene su óscar el mal fario que ha tenido para otros muchos oscarizados
que al recibir el premio han empezada a trabajar menos), Dennis Quaid (veterano
a pesar de su relativa juventud que lleva más de 40 años dedicado al mundo del
cine) y Robert Redford (veteranísimo que trabaja últimamente más, como si
hubiera hecho una delegación de su Festival de Sundance, prestigioso certamen
cinematográfico que se celebra todos los años).
La película es un biopic. Ya
lo expliqué cuando critiqué la cinta Francisco, el padre Jorge. Es, pues, una
película biográfica donde todos los acontecimientos que se narran han ocurrido
realmente y los nombres de los personajes corresponden a la realidad. No son
nombres ficticios.
La cinta dura 121 minutos y
es apta para todos los públicos, aunque me imagino que los niños se aburrirían
bastante por, entre otras cosas, la densidad de los diálogos, muy inteligentes
y bien elaborados.
La película arranca en la
víspera de las elecciones presidenciales de 2004 en los Estados Unidos. El país
se encuentra inmerso en la guerra contra Iraq y Afganistán y todo apunta a que
George Bush hijo (como así ocurriría) va a ser reelegido presidente del país.
La productora de noticias de la CBS Mary
Mapes y su socio, el presentador Dan Rather, descubren una historia que podría
cambiar el curso de las elecciones.
Es la época del trío de las
Azores: George Bush, Tony Blair y José María Aznar. El tema recurrente de los
tres dirigentes es el de las armas de destrucción masiva. En realidad es una
venganza por lo de las Torres Gemelas en 2001. Toni Blair ya ha dicho que se
arrepiente de su decisión. George Bush nunca se arrepentirá. Y Aznar ha dicho
que no sólo no se arrepiente sino que dice que la guerra fue buena para España.
Resulta sorprendente que diga esto sin explicar en qué fue beneficiosa para
nuestro país la guerra de Iraq. La noticia que han
descubierto la productora y el presentador es la siguiente: George Bush recibió
un trato de favor para entrar en la Guardia Nacional sin haber
terminado el servicio militar. Esto podría motivar un escándalo, aunque no tan
grande como el de Nixon, el único presidente que se ha visto obligado a dimitir
por las investigaciones de la prensa, concretamente dos periodistas del diario
The Washington Post.
George Bush lo desmiente,
como es o era habitual en él. Se crea una comisión de investigación de la CBS donde el centro es la
productora de noticias. Tiene para su auxilio un abogado. Todo el jurado, por
así decirlo, está integrado por hombres entre los que sólo hay un periodista,
por lo que Mary lo tiene difícil.
Son largas las sesiones de la
comisión. Mientras los miembros del equipo permanecen expectantes. No se
interroga al presentador. La responsable es Mary como productora de noticias.
Ella es la que decide, con el apoyo del equipo, las noticias que se editan o
no.
Los diálogos son densos,
profundos, pesados a veces. El guión es la adaptación de un libro igualmente
denso que fue un best seller en los Estados Unidos.
La decisión de la comisión es
la expulsión de la CBS
de la productora y desde 2004 no la han vuelto a contratar en televisión. Ha
caído en el ostracismo y se le dio la razón al presidente de los Estados
Unidos. Según la comisión no era cierta la información divulgada y la
responsable única es Mary.
Por solidaridad el
presentador anunció su dimisión tras 24 años presentando el famoso programa 60
minutos. Todo es real, todo es verdad. Los miembros del equipo también se
marchan por solidaridad con la productora. Aquí en España se intentó hacer una
especie de 60 minutos, pero no tuvo éxito.
La película tiene un
excelente montaje, una estupenda fotografía y elegantes movimientos de cámara.
Está bien interpretada, destacando en este apartado Cate Blanchett, sin duda
una excelente actriz.
La película tiene mucho de
política. Y tiene mucho de las relaciones de ella con el tema de la libertad de
expresión y de la libertad de prensa. Estos temas son sagrados para los
estadounidenses como ya se demostró con el caso Nixon. Por eso impactó tanto la
noticia sobre George Bush. La libertad de prensa es intocable y caiga quien
caiga está por encima de todo, por lo que la comisión de investigación de la CBS tuvo que hilar muy fino
para tomar una decisión sobre la noticia emitida por el programa 60 minutos.
Para más inri le dieron al
programa 60 minutos un premio muy importante cuando se emitió la información
sobre George Bush. Se supone que Bush mintió con el tema de la Guardia Nacional y el trato de
favor supuestamente recibido, como mintió con la guerra de Iraq que cambió el
curso de la Historia. Hoy
seguimos pagando las consecuencias de esa Segunda Guerra del Golfo por la
existencia de Al Qaeda y sobre todo ahora del Estado Islámico.
Están muy recientes los
atentados de París, los 129 muertos que de momento han provocado y la
vulnerabilidad que en el fondo tienen todos los países ante la amenaza
terrorista. Pero todo queda en un segundo plano porque lo que tiene verdadero
protagonismo es la verdad, como dice el título de la película. Por cierto que
el original es igual: Truth, verdad en inglés.
La verdad está por encima de
todo y a ella tienen que atenerse en su totalidad todos los periodistas. No se
sabe en realidad qué ocurrió con George Bush y su trato de favor, pero el
equipo de investigación indagó lo suficiente para poder emitir la noticia. El
pueblo norteamericano le dio la razón a Bush reeligiéndolo presidente, pero
todo estaba demasiado mediatizado por el tema de la Guerra de Iraq y las
supuestas armas de destrucción masiva de Sadam Hussein, el gran enemigo, al que
se consiguió detener y al que ajusticiaron tras un juicio sumarísimo. George
Bush se salió con la suya, pero no se ha acabado el terrorismo, sino que
aumenta cada día y existe una especie de pánico colectivo por como ya he dicho
la vulnerabilidad de los países frente al yihadismo.
Considero que la película es
buena y le concedo tres estrellas. No ha recibido prácticamente publicidad. Yo
mismo la descubrí por casualidad entre las carteleras y en las revistas de
cine. Ahí nació mi interés por ver la película, que merece realmente la pena.
Salud y suerte.
Calificación:
José Cuadrado Morales
SEGÚN LO QUE COMENTA ENTRE MIS GUSTOS NO ES UNA PELÍCULA QUE YO NO IRÍA A VER
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