Os voy a contar una anécdota sobre un curso de hebreo por
Internet que se imparte desde Israel hacia distintas partes del mundo. Resulta
que mi hermano está casado con una israelí, tienen hijas y viven en Israel
desde hace mucho tiempo. Pues nada que tuvo que aprender hebreo ya que su mujer
hablaba muy poco de español, además sus
hijas tampoco lo controlan ya que aprendieron a hablar hebreo
desde pequeñitas.
Mi madre no tiene ni puñetera idea del hebreo y le cuesta
mucho trabajo hablar con mis sobrinas y un poco menos con mi cuñada pero
también le cuesta.
Pues nada un buen día se propuso sentarse por primera vez
delante de un ordenador y aprender hebreo. Se apuntó al curso anteriormente
mencionado y comenzó la odisea ya que se trataba de aprender hebreo a la vez
que aprendía a usar el ordenador. Lleva tres clases y de momento controla más
el hebreo que el ordenador. La clase dura hora y media aproximadamente empieza
a las siete y media y termina a las nueve, media hora para chatear con los
compañeros y una hora de clase.
Mi madre tiene 76 años y muy buena voluntad
para aprender pero es un poco inquieta. Bueno pues, mi padrastro y yo tenemos
que estar pendientes y cerca de ella, ya que a veces descontrola el ratón del ordenador
y se le escapa la flecha de la pantalla y empieza a chillar, "donde esta la
flecha que no la encuentro", por ejemplo. Tampoco controla el lápiz, se le va
para cualquier sitio, pasa que a veces tiene que dibujar las letras hebreas
mientras está dando clase y no puede. Se mosquea por estas cosas tan simples,
pero no llega a ponerse nerviosa.Ha aprendido, que es lo más importante, o sea, está
aprendiendo bastante; incluso aprendió a mover el ratón y a manejar el lápiz.
Cecilia.
Olé por tu madre, Cecilia!!! Ni la edad, ni la enf. mental son obstáculo... lo que dew verdad importa es la voluntad que le pongas a las cosas!!!! Muy buen ejemplo, ya nos contarás qué tal lo lleva tu madre dentro de un tiempo, un saludo
ResponderEliminarGracias por el comentario. Un saludo para todos. Mi madre sigue aprendiendo. Cecilia
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