50 AÑOS DE LA OPERACIÓN CLAVEL.

La “Operación clavel” nació a raíz de la terrible inundación provocada por el desbordamiento del Tamarguillo, que dejó a más de 30.000 sevillanos sin hogar. Fue una campaña de solidaridad, promovida desde la radio por el locutor Bobby Deglané , pidiéndose ayuda para los damnificados. España respondió espléndidamente. Se recibieron muchas llamadas para contribuir a esta causa: la emisora recibía unas 3000 llamadas telefónicas al día y fue preciso contratar a unas 50 telefonistas. Salió una caravana de la madrileña plaza de Legazpi en un cortejo al que a lo largo del recorrido hacia Sevilla fueron uniéndose vehículos hasta alcanzar más de 140 camiones (incluido el que era el más grande de España, con capacidad para 20 toneladas) que ocupaban 14 kilómetros. Transportaban enseres y alimentos, como patatas, huevos, dulces, sardinas, guisantes, cajetillas de tabaco, jabón, alubias, vino y juguetes. Cuando la caravana llegó a Sevilla, a las dos de la tarde, ya se había producido la tragedia. Cuarenta minutos antes, la avioneta “Simpson”, que acompañaba a la caravana, se precipitó sobre la multitud en la autopista de San Pablo, al lado del Tamarguillo. Todo apunta a que la avioneta realizó un vuelo rasante para fotografiar el ambiente, chocó con unos cables de alta tensión, se precipitó sobre la gente y se incendió. Murieron en un primer momento 20 personas y más de 100 resultaron heridas. La escena reflejó estupefacción, confusión, caos y dolor: una señora se salvó corriendo hacia la orilla y pudo rescatar a una niña que la gente había tirado en su huida, un muchacho intentó sacar de entre las llamas a su madre y se quedó solo con un trozo de su mantón entre las manos. En el suelo, cuerpos, zapatos, prendas, sangre y dos o tres sacerdotes impartiendo la absolución. Todos los actos festivos previstos quedaron suspendidos, aunque la entrega de socorros se realizó según lo proyectado.

Manuel, un usuario de nuestra unidad vivió en primera persona estos acontecimientos, aquí va su testimonio.

“Yo tenía 10 años y mi abuela vivía en una casa de vecinos de la calle Recaredo, cerca de la Puerta Osario. Debido a la riada la casa de mi abuela también se inundó, por suerte ella vivía en el piso de arriba de la casa con lo que a su casa no le pasó nada, pero ayudo a sus vecinos a salvar sus pertenencias. Media Sevilla estaba inundada y fueron muchas las perdidas materiales que se produjeron, había tanta agua que la gente iba en barcas por la calle.
El locutor de Radio Bobby Deglané organizo una caravana de ayuda humanitaria, que venía desde Madrid, para los damnificados de la riada. Mucha gente de Sevilla fuimos a recibirlo. Yo había quedado con una vecina de mi abuela, que tenía una hija de mi edad, para ir a ver el acontecimiento. Dimos un buen paseo hasta llegar cerca de la Ronda del Tamanguillo, para ver de cerca lo que traían los camiones de ayuda, había muchísima gente. Aunque mi amiga y yo queríamos estar muy cerca su madre nos dijo que nos quedáramos apartados un poco ya que tanta bulla era muy incomoda. Cuando de pronto vimos un humo negro muy grande, toda la gente empezó a chillar y a llorar. Todo estaba lleno de gente herida, coches de caballos con personas sangrando, vi un triciclo con una persona con la cabeza cortada. Mucha gente sobrevivió pero les quedaron secuelas para toda la vida. Mi vecina nos cogió de la mano y nos llevo corriendo para casa de mi abuela. Cuando nos vieron llegar nos abrazaron y les dio mucha alegría vernos. Con la edad que tengo este episodio de mi vida jamás se me olvidará.”

Manuel Solís.

El Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla (ICAS), presenta una exposición sobre estos acontecimientos, nosotros ya la hemos visto y merece la pena. Esta abierta hasta el día 19 de febrero y es muy interesante ¡No os la perdais! ICAS (Calle del silencio nº 1)
Aquí teneis el video que se muestra en la exposición sobre los testimonios de muchas de las personas que estuvieron aquel triste día.