lunes, 6 de noviembre de 2017

LA POSTVERDAD

Plantear por escrito una nueva visión del “Holocausto”, admitiéndolo pero minimizando sus dimensiones, el conocimiento de éste por parte del pueblo alemán, o incluso negando el hecho en sí, es ejemplo máximo de lo que se ha dado en llamar la postverdad, que castellanizado es “Después de la verdad “; vaya por delante que esta tendencia tiene los días contados, pues su triunfo sería el fracaso de toda la historia del pensamiento humano, que no es otra que la búsqueda de la verdad en las distintas ramas del conocimiento a través del tiempo.
Así, es relativizar u obviar la evidencia para poder “justificar” un discurso, “manipulando” datos reales o presentando aquella parte de la verdad que sea favorable, ocultando la realidad en su conjunto; ésto es lo que siempre se llamado una “media verdad”.
Para el triunfo de la mentira sólo hace falta mentir o no decir la verdad, o , y es lo peor, la media verdad, pues es la que más miente o engaña, al mostrar cierta realidad aparentemente lógica o verídica sustentada en algunos datos que coinciden, pero que vistos en conjunto, no son sólo mentira, sino que dan pie a la confusión si se reiteran o proclaman sin “vericidad”, sin todos los elementos analizables y analizados.
La postverdad se da en sociedades libres, donde el relativismo impera ; si todo se relativiza, todo está en cuestión. Si todo está en cuestión, y nada permanece , TODO puede ser objeto de revisión , desde la calidad del pan, el turismo, el PIB, la recogida de naranjas , la veracidad del “holocausto” , o la unidad de España, por ejemplo.
Este relativismo está sustentado en lo que se llama la sociedad “Liquida”, de plastilina, amoldable,
sin robustez moral , impresionable, con desconfianza entre unos y otros; la precariedad del empleo, la insoportable e indecente pérdida adquisitiva del salario ocasiona una angustia personal y familiar cuando además el empleado tiene sobre sí toda una bolsa de desesperados que le ven no ya como compañero de trabajo sino como adversario laboral, debido a la “precarización. Cabe preguntarse si esa precariedad es casual o diseñada, pues es la clave del sometimiento de la fuerza del trabajo ante el capital, como dirían los camaradas.


Diego. 


2 comentarios:

CRPS León dijo...

Llegar a la verdad de los acontecimientos con todos los factores analizados sin medias verdades y sin tildarnos de relativistas es algo a lo que tenemos que aspirar.

Anónimo dijo...

Me parece muy interesante el articulo . Yo personalmente odio las mentiras y mucho mas las verdades a medias . Por el simple motivo de que te sientes como un tonto.Ymucho mas sabiendo que te miente.